National Geographic destacó cuatro destinos de la región entre los mejores del planeta para visitar durante el próximo año. La elección revela una tendencia clara: nuestra parte del mundo atraviesa un momento único, con proyectos culturales ambiciosos, paisajes que se preservan con responsabilidad y propuestas que combinan tradición con innovación.
El listado reúne rincones muy distintos entre sí: desde grandes ciudades que renacen culturalmente hasta islas caribeñas comprometidas con la conservación marina, pasando por costas donde el surf es casi una religión.
1. Río de Janeiro: una ciudad que vuelve a brillar
Río de Janeiro siempre fue sinónimo de alegría, playa y ritmo, pero en 2026 suma un capítulo especial a su historia. La reapertura completa del Museo Nacional, tras años de trabajo luego del incendio de 2018, es uno de los hitos culturales más importantes del año. La recuperación de piezas emblemáticas —como el meteorito Bendegó— simboliza el renacimiento de una institución clave para la identidad brasileña.

A este impulso cultural se suma la renovación del icónico Copacabana Palace, que estrena un spa de dos niveles y nuevas áreas de lujo, y un calendario de eventos que promete atraer a viajeros de todo el mundo. En mayo, la ciudad será sede del mega concierto “Todo Mundo no Rio”, con más de 2,5 millones de asistentes previstos. Con playas eternas, montaña y una energía urbana inagotable, Río se reafirma como un destino ideal para combinar cultura, naturaleza y entretenimiento.

2. Dominica: un santuario para los gigantes del océano
Para quienes sueñan con naturaleza pura, Dominica se perfila como una de las joyas del Caribe. En 2026 inaugurará la primera reserva marina del mundo dedicada exclusivamente a los cachalotes, un espacio protegido de 800 km² donde estos enormes mamíferos podrán ser observados de manera responsable.

La isla, conocida por su geografía volcánica, suma además propuestas de ecoturismo de lujo y experiencias únicas: caminatas hacia cascadas, baños en manantiales termales y la visita al Boiling Lake, ahora más accesible gracias a un teleférico moderno que facilita el ascenso sin perder la mística del lugar.

3. Costa de Oaxaca: surf, serenidad y arquitectura de autor
La Costa Chica de Oaxaca se consolidará en 2026 como uno de los nuevos templos del surf a nivel mundial. Puerto Escondido recibirá la declaración de Reserva Mundial de Surf, un reconocimiento que celebra no solo la calidad de sus olas, sino también el crecimiento de una comunidad deportiva vibrante.

Además, la región mejora su conectividad con una autopista que reduce notablemente el viaje desde la capital del estado, y suma alojamientos de diseño que ya marcan tendencia, como Hotel Terrestre y Casona Sforza. El arte también tiene su espacio con Casa Wabi, un proyecto que une la arquitectura contemporánea con propuestas culturales que dialogan con el paisaje costero.

4. Medellín: creatividad que florece todo el año
Conocida como la “Ciudad de la Eterna Primavera”, Medellín continúa sorprendiendo por su transformación urbana. La Comuna 13, convertida en un museo a cielo abierto, late con murales, espectáculos y recorridos que ponen en valor la resiliencia de sus habitantes. En paralelo, la Feria de las Flores y los festivales de arte urbano en barrios como El Poblado enriquecen una agenda cultural diversa y dinámica.

Su sistema de transporte integrado —metro, metrocable, tranvía y buses— sigue siendo modelo en la región y facilita descubrir una ciudad que se reinventa sin perder su identidad.





