Viajar a Estados Unidos siempre ha implicado cumplir con una serie de requisitos y pasar por controles estrictos, algo que para muchos pasajeros es uno de los momentos más tensos de todo el recorrido. Sin embargo, el país norteamericano acaba de anunciar una serie de cambios que prometen agilizar el proceso, mejorar la experiencia de los visitantes y, al mismo tiempo, mantener la seguridad como prioridad.
La Administración de Seguridad en el Transporte (TSA) y el Departamento de Seguridad Nacional presentaron un paquete de medidas que, aunque hoy se aplicarán únicamente en aeropuertos de Estados Unidos, podrían convertirse en un modelo a seguir para otras terminales del mundo si demuestran ser efectivas. El eje está puesto en el uso de tecnología avanzada, la mejora de la infraestructura y la adaptación a un volumen de pasajeros que crece año tras año.
Menos trámites incómodos y más tecnología
Uno de los anuncios más celebrados por los viajeros es la eliminación de la obligación de quitarse los zapatos en los controles de seguridad. Este cambio será posible gracias a la incorporación de escáneres de última generación y algoritmos inteligentes capaces de detectar objetos ocultos sin necesidad de ese paso extra que, hasta ahora, era parte de la rutina en la mayoría de los aeropuertos del país.
Pero las novedades no se quedan ahí. También se implementará el programa «Families on the Fly», que habilitará carriles exclusivos para familias con niños pequeños en aeropuertos seleccionados. De esta manera, se busca reducir los tiempos de espera y hacer que el paso por seguridad sea menos estresante para quienes viajan con chicos, sin perjudicar la fluidez de los demás pasajeros.
Un plan con proyección internacional
Aunque estas innovaciones están pensadas para aplicarse en el territorio estadounidense, las autoridades no descartan que, en caso de obtener buenos resultados, puedan replicarse en aeropuertos de otros países. La secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, subrayó que la meta es optimizar los procesos sin reducir los estándares de control, algo que podría marcar una nueva tendencia global en materia de seguridad aeroportuaria.
Si se concreta su expansión, estas medidas podrían transformar la experiencia de millones de pasajeros en todo el mundo, aliviando puntos críticos de congestión y haciendo que los viajes internacionales sean más fluidos.
El impacto del Real ID
Otro aspecto clave para quienes piensan viajar dentro de Estados Unidos es la entrada en vigor de la ley que exige contar con una identificación Real ID desde mayo de 2025 para abordar vuelos domésticos o ingresar a edificios federales restringidos.
Este documento, disponible solo para ciudadanos estadounidenses y personas con presencia legal comprobada en el país, incorpora estándares de seguridad más estrictos que las licencias o identificaciones estatales comunes. Aunque no afecta de forma directa a los turistas internacionales para su ingreso al país, sí es relevante para quienes, una vez dentro, quieran tomar vuelos internos.
Viajar mejor, con menos estrés
Si bien los controles en aeropuertos siempre formarán parte del viaje, la combinación de tecnología avanzada, infraestructura adaptada y políticas pensadas para grupos específicos de pasajeros abre la puerta a una experiencia más ágil y amigable.
Imaginate llegar a un aeropuerto de Estados Unidos y pasar por seguridad sin quitarte los zapatos, ver que las familias con chicos tienen un carril propio y sentir que todo fluye con mayor rapidez. Estos cambios, sumados a la posibilidad de que se extiendan a otras partes del mundo, son una señal de que la experiencia de volar puede seguir mejorando sin sacrificar seguridad.
Para quienes planean su próximo viaje, estar al tanto de estas medidas puede marcar la diferencia entre una espera interminable y un comienzo de vacaciones mucho más relajado.
